Lo cierto es que nos quedamos sin la peonza de Espiral Edublogs, y como dicen los chicos, lo importante es participar...
Pero la sorpresa nos ha venido luego, porque los compañeros en el cole, que se alegraron mucho por nuestra clasificación, se interesaron por la final de los blogs clasificados... y así fue como nos llegó la peonza de Fátima, una profe de Infantil.
¿Quién dijo que no jugaríamos con la peonza? Pues ahora podemos hacerlo, con una peonza como las de toda la vida. Un día saldremos al patio y la estrenaremos.
Es la peonza de 4ºA, pero siempre será la peonza de Fátima.
Un detalle simpático, un premio emotivo, y para no olvidar.
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